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Diana García, es una vecina de la ciudad de Inca que tiene 35 años. Hace unos meses le diagnosticaron una enfermedad denominada endiometriosis rectovaginal, pero que se encontraba en su grado más alto (Gravedad 4). En un primer momento, Diana acudió a la clínica Juaneda de Inca donde fue operada y se le extirpó una trompa y el ovario derecho. Le fueron quemados por explosión endiometriosis. El día 3 de marzo de 2013, se encontró mal y la ingresaron en el hospital. Con anterioridad, en diciembre de 2012, le encontraron una reproducción en el ovario izquierdo con questes de 12 centímetros cada uno.
Tras ponerse en contacto con la directora de la Asociación de Enciometriósis de España, María Antonia Pacheco, consiguió que la pusieran en contacto con el Doctor Ángel Martín, director de ginecología de Son Llàtzer, el único conocido para tratar esta enfermedad y su consecuente operación.
Nuestra protagonista consigue hablar con el especialista y se puso en lista de espera para operar. A partir de ese momento Diana sigue esperando, sangrando a diario, hemorragias internas etc.
«Yo era una ejecutiva de éxito, con un buen sueldo y una familia consolidada. Ahora, he perdido el trabajo, pero lo peor de todo es que me estoy muriendo en vida.Mi comida diaria es un potito de bebé y tardo más de 15 horas en hacer la digestión. La sanidad pública está desbordada y la falta de quirófanos está provocando retrasos en las intervenciones. En Mallorca sólo hay un equipo médico preparado para afrontar el tipo de operación que requiere mi enfermedad, pero debido a la complejidad (se precisan un médico de cada especialidad en quirófano) los retrasos pueden superar los dos años en lista de espera. Yo era una mujer de 60 kilos, pero ahora no llego ni a los 48. No como, no duermo, no vivo. Lo tengo todo preparado. Es muy duro tener que hablar así, mucho más sabiendo que tengo niños pequeños y un marido al que adoro, pero ya me estoy haciendo a la idea. Tengo el testamento hecho y nos estamos mentalizando para lo peor. ¿Cómo puede vivir una persona sin comer ni dormir durante dos años?", concluye.
Actualmente no puede hacer vida normal, ni dormir por los dolores insoportables. El Doctor Ángel Martín informa que sólo tiene quirófano los martes y jueves y que primero son los casos oncológicos y necesitan un equipo cualificado para su intervención. La paciente cada vez va empeorando y la endiometrosis no tiene otro tratamiento que la intervención y se le está reproduciendo muy rápidamente.